Pinto Pinto Gorgorito

Antes de empezar deberíamos tener presente algunas cosas con las que nos vamos a encontrar.

Prepárate para registrarte con nombres de usuario y contraseñas que tendrás que recordar.

En Internet es muy común tener que registrarse en aquellas páginas de las que queremos obtener algún servicio. Eso conlleva a habituarse a cierto lenguaje. Aquí tienes ejemplos de lo que normalmente te encontrarás:

Crear una cuenta (Registrarse, Register, Sign up): Opción que da acceso a registrarse por primera vez.

Usuario (user): Al registrarse hay quien usa un nombre de usuario “serio” para cada vez que se registra en páginas serias, oficiales, institucionales donde la identidad es importante, y usan otros nombres de usuarios para actividades poco serias o de ocio.

Contraseña (password): Gran problema. ¿Una única contraseña para actividades “serias” y otra para las de ocio?. Facilitaría el no tener que recordar un monton de contraseñas. Pero ojo. Si usamos este método debemos evitar la vulnerabilidad que supone para nuestra seguridad. Mantenga única y exclusivamente las contraseñas en su memoria, o almacenadas sin dar pistas de lo que son. Huya de fechas, nombres, DNI, etc… datos que pueden ser descubiertos por ingeniería social. Muchos sitios miden la seguridad de tu contraseña por el número de caracteres, el empleo de números, mayúsculas, etc. Tenlo en cuenta para elegirla.

Permanecer registrado (recordar contraseña, remember password, automatic login, iniciar sesión automáticamente): NO, NUNCA marcar esta opción. Cualquier usuario que posteriormente acceda a esa página desde el mismo ordenador se encontrará automáticamente registrado con tu usuario y contraseña.

Acceder (Entrar, Iniciar sesión, Login, submit): Botón para acceder al sitio. Si su navegador le envía un mensaje del estilo ¿Desea que ****** recuerde su contraseña? indique NO.

¿No puedes acceder a tu cuenta? (¿Olvidó su contraseña?, ¿Forgot your password?): Puede que no llegues a recordar tu contraseña. En ese caso esta opción te llevará a algún formulario donde te preguntarán por una serie de datos que diste cuando te registraste y tendrás que dar tu dirección de correo electrónico, responder a tu pregunta secreta (cuidado con la ingeniería social) para poder cambiar tu contraseña, o que te la remitan a tu correo electrónico.

El captcha: Es posible que el formulario de registro o de acceso te obligue a escribir algo, que solo una persona es capaz de leer, con el fin de identificarte como “humano” (y así evitar que sean programas automáticos los que saturen una web registrando usuarios no reales). Es lo que se llama captcha.

Finalizar sesión (salir, logout, cerrar sesión): tan importante o más que todo lo anterior: Cuando termines de usar la página… finaliza la sesión (salir, logout, cerrar sesión). Así, ningún usuario posterior a nosotros podrá acceder desde el mismo ordenador con nuestra cuenta.

El idioma no es un problema ¿o sí?.

Hasta el castellano puede ser un problema. ¿Por qué? Porque muchas veces no leemos. Hay que leer. Todo está ante nuestras narices. Leyendo bien podemos evitar pequeños o grandes fracasos o frustraciones en nuestra vida internauta (lo digo por experiencia).

Habituarse a cierto vocabulario no estaría nada mal. O sus equivalencias en inglés. Y para traducir nada mejor que el traductor de Google.

Nota: he intentado buscar algún diccionario, glosario, o jerga internauta. Los hay, pero unos tienen unas cosas y otros tienen otras, así que os remito a Google.

Web 1.0, 2.0 y 3.0… pasado, presente y futuro de Internet.

¿En qué era de internet vives? Esta es la filosofía: En la Web 1.0 se ofrecía información al usuario (páginas estáticas, información fija, y el usuario solo lee). La Web 2.0 se basa en la interacción con el usuario (que no solo lee sino añade contenido, escribe). En la Web 3.0 es el usuario quien define la información que es relevante mediante sistemas de recomendaciones, es la web inteligente porque ofrece información relevante al usuario y es omnipresente porque se accede desde cualquier dispositivo, desde teléfonos móviles, coches, hasta la nevera, es omnipresente porque toda la información se genera, se gestiona y se difunde online y tiene relevancia si el usuario así lo cree. Es el usuario el que lee, escribe y decide.

La Web 3.0 ya está aquí y quizás no te habías dado cuenta.

En Internet, la curiosidad no mató al gato.

Sencillamente: sé curioso. Lee, busca, aprende, encuentra soluciones. Todo está en internet, hasta su propio funcionamiento. ¿Qué puede pasar? No esperes que te den peces, aprende a pescar.

¿Verdadero o falso?: Información, publicidad, identidades, bulos, spam… Tu decides.

En internet hay mucha información, desinformación, verdades, mentiras, identidades verdaderas, identidades falsas, bulos y leyendas urbanas, fakes, verdaderas joyas, verdaderas basuras, publicidad disfrazada de información, disfraz que engaña a muchos. Como en la vida fuera de la red. Bebe de las fuentes, ten un pensamiento crítico, emplea la lógica y no hagas en internet lo que no harías fuera de él. Sentido común.